Evolución de la situación en Kosovo
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Steinmeier antes del encuentro de los ministros de Asuntos Exteriores de la UE sobre el Kosovo, ©AA/Kotthaus (AA/Kotthaus)
El pasado 17 de febrero Kosovo proclamó su independencia. Alemania, al igual que la gran mayoría de los Estados miembros de la UE, ha decidido reconocer el país. La Unión Europea está muy comprometida con Kosovo. El objetivo supremo es alcanzar la estabilidad y el bienestar duraderos de la región en su conjunto.
Con la declaración de independencia de Kosovo se pone fin al largo y difícil proceso de desintegración de la antigua Yugoslavia. Este proceso ha causado mucho sufrimiento y mucho derramamiento de sangre. El Ministro Federal de Relaciones Exteriores Steinmeier manifestó el pasado 18 de febrero en Bruselas su esperanza de "que esta región se estabilice" y que "por fin dejemos atrás los fantasmas del pasado y podamos mirar al futuro". Expresó asimismo su deseo de que el futuro depare paz, estabilidad y prosperidad económica para los Balcanes en su conjunto.
El 18 de febrero los Ministros de Exteriores de la UE se pusieron de acuerdo en que los Estados miembros de la UE decidirían de forma autónoma qué relaciones desean mantener con Kosovo de conformidad con la práctica nacional y el derecho internacional.
Steinmeier indicó que en los últimos años "se había probado todo" para conseguir que las partes en conflicto llegaran a una solución negociada con respecto a la cuestión de Kosovo. Aunque los intentos no sirvieron de nada. Después de todos estos años de esfuerzos, ya no parecía que otros intentos fueran a dar resultado, según palabras de Steinmeier.
El Ministro Federal Steinmeier prosiguió diciendo que Alemania y todos los países de la Unión Europea son muy conscientes del hecho de que el parlamento y los dirigentes políticos de Kosovo se comprometieron a que su país respete los principios del Estado de Derecho y los fundamentos democráticos y aseguraron que Kosovo es la patria de todos sus ciudadanos.
Alemania reconoce a Kosovo
El 20 de febrero, el Gobierno Federal reconoció a la República de Kosovo con arreglo al derecho internacional y aprobó el establecimiento de relaciones diplomáticas con el país. El reconocimiento formal y la declaración sobre la disposición a establecer relaciones diplomáticas se materializaron a través de una carta remitida por el Presidente de la República Federal de Alemania al Presidente de Kosovo Fatmir Sejdiu. La hasta ahora "oficina alemana de enlace Kosovo en Pristina" ha adquirido el rango de embajada.
Entre los países que ya han reconocido Kosovo se encuentran, por ejemplo, Francia, Gran Bretaña, los Estados Unidos de América, Australia y Turquía.
El compromiso de la comunidad internacional
Kosovo está bajo administración de las Naciones Unidas desde el año 1999. La Resolución 1244 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, del 10 de junio de 1999, estableció el mandato para la misión UNMIK (Misión de Administración Provisional de las Naciones Unidas en Kosovo), cuyo objetivo consiste en establecer una administración local interina para restablecer la normalidad tras la contienda. El actual jefe de la UNMIK es el alemán Joachim Rückert.
La resolución 1244 seguirá vigente hasta que sea modificada o derogada por el Consejo de Seguridad de la ONU. En este fundamento de derecho internacional se basó la ONU en su día para establecer la administración civil en Kosovo. Lo que, entre otras cosas, significa que en el futuro seguirá habiendo un representante internacional civil que observe Kosovo tras la declaración de independencia.
Ejercerá al mismo tiempo la función de un representante especial de la UE para el país. El nuevo Representante Especial de la Unión Europea para Kosovo es Pieter Feith.
La función del Representante Especial consiste, como su propio nombre indica, en representar a nivel político al Alto Representante de la Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Javier Solana, en una región específica. Es, por tanto, "voz" y "rostro" de la UE y su política.
Alemania y la Unión Europea quieren ayudar a este joven país. Se enfrentan a grandes retos: hay que crear instituciones basadas en los principios del Estado de Derecho y la democracia y que respeten y protejan los derechos humanos. La población de Kosovo debe percibir una mejora concreta de sus condiciones de vida.
El Gobierno Federal y numerosas organizaciones no gubernamentales alemanas vienen realizando un ingente esfuerzo de asistencia. Alemania ya ha asumido en reiteradas ocasiones el mando rotatorio de la operación KFOR, participa en UNMIK y en la misión de la UE en Kosovo.
KFOR (Fuerza de Kosovo) es una tropa multinacional dirigida por la OTAN que opera en el país desde la guerra de Kosovo en 1999. Tiene su cuartel general en Pristina. Su función se establece en la resolución 1244 y en un mandato de la OTAN.
EULEX Kosovo: Misión civil de la Política Europea de Seguridad y Defensa para la estabilización de Kosovo
La pieza clave del futuro compromiso de la Unión Europea en Kosovo será la misión EULEX. Ya en diciembre pasado el Consejo Europeo decidió contribuir a la estabilización de Kosovo con una misión civil. Agentes de policía, juristas y otros especialistas procedentes de la Unión Europea ayudan a los habitantes de Kosovo a establecer un cuerpo de policía, un sistema judicial y un sistema administrativo multiétnicos. A principios de febrero se aprobó el acto correspondiente en el seno de la UE y el 16 de febrero se dio el pistoletazo de salida para la fase de establecimiento de la misión. El jefe de esta misión es el francés Yves de Kermabon.
El 5 de marzo el Gobierno Federal dio luz verde a la participación de Alemania en la misión.
Funciones de la misión EULEX
La UE desempeñará particularmente funciones en las áreas relacionadas con la 'supremacía de la ley'. Concretamente se encargará de establecer desde un cuerpo de policía, unos servicios de aduanas y un sistema judicial hasta un sistema administrativo. Más de 1.800 especialistas prestarán asesoramiento en el desarrollo de la administración de Kosovo. Al mismo tiempo la misión conserva determinadas responsabilidades ejecutivas como, por ejemplo, el enjuiciamiento de las causas por delincuencia organizada, crímenes de guerra, corrupción y delitos entre etnias y el mantenimiento del orden público.
Es la mayor operación jamás puesta en marcha por la Unión Europea. A fin de garantizar una transición fluida de la misión dirigida por la ONU, UNMIK, a la Unión Europea, se constituyó un equipo de planificación en Pristina que trabaja intensamente en los preparativos de la misión europea.