César Román

Presidente de Plataforma por Madrid

Por Estela del Arco. Redacción. Madrid

Pregunta: César, ¿cómo llega a la política?

Respuesta: Desde muy joven me interesó la política y participé en diferentes ideas. Desde el 98 hasta el 2004 no he participado en ninguna organización política, digamos que he estado en dique seco. Y ahora creo que es el momento de participar en un novedoso proyecto como es la Plataforma por Madrid.

P:¿Y a la Plataforma?

R: Un amigo me aconsejó que echara un vistazo a la página web de la Plataforma por Cataluña Entré en la página, y me dije, ¡hombre esta gente parece que saben donde tienen la mano derecha. Vamos que tienen sentido común!. Me llamó mucho la atención que sólo hubieran presentado listas a 7 ayuntamientos y que hubieran conseguido representación en 5 de ellos, lo que para mí era una muestra de que sabían hacer las cosas. Contacté con Josep Anglada, nos pusimos de acuerdo y comenzamos a colaborar.

P:¿Y cuándo deciden crear la Plataforma por Madrid?

R: Anglada ya estaba trabajando en expandir el modelo de la Plataforma por Cataluña a todo España, y hablamos sobre las posibilidades de montar el mismo proyecto en Madrid. Se encargó un estudio sobre la viabilidad política del proyecto en Madrid y la sorpresa fue que el informe nos confirmó que nuestras ideas tenían apoyo social incluso para obtener representación política a nivel autonómico y con un nivel de aceptación superior al 20% de la población de la Comunidad de Madrid. Con la seguridad de estos datos nos pusimos a trabajar y se dieron los pasos para los trámites legales de constituirnos.

P:¿Es obligado preguntarles si son de izquierdas o de derechas?

R: En pleno siglo XXI nadie es puramente de derechas o de izquierdas. Nosotros preferimos sacar todo lo bueno que tiene cada lado e intentamos llevarlo a la práctica. En el fondo la Plataforma es eso, tiene cosas que la gente puede considerar de derechas y otras de izquierdas.

P: ¿Qué planes tiene la Plataforma por Madrid?

R: ¿En que sentido?

P: En el sentido de plazos, proyectos, metas...

R: Hemos distribuido nuestra estrategia en tres fases diferenciadas. Una primera fase de preorganización y en la que tenemos como objetivo dar a conocer nuestro nacimiento. Esta fase tendrá su punto culminante en el acto de presentación de la Plataforma por Madrid que tendrá lugar a mediados del mes de octubre de 2004, y en la que tomará la palabra Josep Anglada. Después desarrollaremos una fase de estabilización de la estructura y organización de candidaturas electorales, cuyo punto culminante será el Congreso de Afiliados. Y la tercera fase será la precampaña y campaña electoral, cuyo punto culminante serán evidentemente las elecciones. En todo ese periodo lanzaremos una serie de campañas generales a nivel de toda la Comunidad de Madrid, pero sin perder nunca de vista que nuestro objetivo es de ámbito local. Pero la aseguro que vamos a crear importantes noticias con nuestra forma de actuar.

P: Pero entonces ¿van a presentar candidaturas en toda la Comunidad?

R: En principio vamos a presentar candidaturas de manera prioritaria en una serie de municipios donde tenemos grandes posibilidades de obtener representación. De hecho ya tenemos un buen número de núcleos constituidos. A partir de ahí, si en otras localidades surgen grupos de ciudadanos que quieren lanzar nuestra propuesta, entonces evaluaremos las posibilidades electorales y si son positivas nos pondremos con ello. Pero en principio hay localidades en las que tenemos decidido que nos vamos a presentar en las elecciones municipales del 2007 y en otros municipios nos presentaremos en el 2011.

P: ¿Dónde tienen ya núcleos creados?

R: Tenemos ya organizaciones formadas en Coslada, San Sebastián de los Reyes, Humanes, Aranjuez, Algete, Pinto, Leganés, Ciempozuelos, Hoyo de Manzanares, Boadilla del Monte, Rivas y Arganda. Y tenemos responsables que están formando núcleos en otros cinco municipios más, además del mayor núcleo que lógicamente es Madrid capital. La verdad es que la respuesta está siendo muy buena para llevar nada más que unos meses trabajando.

P: ¿Y las elecciones autonómicas?

R: Para obtener representación en unas elecciones autonómicas el apoyo popular al proyecto tiene que ser muy alto, y por el momento si bien sabemos por estudios iniciales que este apoyo existe en la sociedad, hay que conseguir traducir ese apoyo en votos, lo cual es algo más complejo. Ahora bien, si las estadísticas van demostrando que nuestras posibilidades se acercan a la obtención de un buen resultado, entonces estudiaríamos la presentación de listas. Pero desde luego tenemos los pies en el suelo, y no vamos a desgastar nuestros recursos en participar en unos comicios en los que no tengamos posibilidades reales de victoria. Presentarse por presentarse sería una necedad por nuestra parte.

P: Hablando de recursos, participar en política requiere de financiación.

R: Sí, y una de las primeras cosas que nos hemos asegurado son fuentes viables de financiación. Evidentemente no tenemos capacidad financiera como para competir con los grandes partidos a nivel autonómico, pero sí para plantear una batalla muy seria en las próximas municipales en los lugares en que queremos.

P: ¿Cuántos concejales o alcaldes espera obtener?

R: Me gusta ser realista y no me gusta hacer predicciones. Sabemos que somos capaces de conseguir un buen resultado electoral, como sucedió en Cataluña. Allí, en las primeras elecciones a las que nos presentamos conseguimos representación en cinco ayuntamientos y ahora las encuestan nos dan representación en más de medio centenar de ayuntamientos. Evidentemente cuantos más consigamos mejor, y estamos seguros que los madrileños nos van a apoyar. Pero repito que somos ante todo muy realistas. No vamos a presentar candidaturas por presentarlas, porque eso a la corta solo genera un derrumbamiento de la organización, y tampoco vamos a echarnos atrás en aquellos lugares donde el resultado esté reñido.

P: ¿Pero no me dice un resultado?

R: Para nosotros sería un éxito obtener representantes en el 75% de las listas que presentemos, y no creo que vayamos a presentar menos de 25 candidaturas a las municipales.

P: Entonces, está seguro de su victoria...

R: Completamente. No me gusta perder el tiempo y si creyera que vamos a perderlo me quedaría en mi casa.

P: ¿Porqué la inmigración ilegal supone un problema según ustedes?

R: La gente normal queremos vivir con tranquilidad, sin sobresaltos, con un trabajo digno y bien remunerado y sin tener que estarte planteando si tus hijos pueden salir a la calle. Y la mayoría nos contentaríamos con vivir de acuerdo a eso que parece tan sencillo. Pero en lugar de acercarnos a ese objetivo la verdad es que nos estamos alejando por la mala gestión de la administración.

P: ¿Tan mal estima que vivimos?

R: No es que vivamos tan mal, es que nuestra calidad de vida se está resquebrajando y la progresión de esa situación es geométrica. Vivimos en una Autonomía en la que se disparan los índices de delincuencia, fundamentalmente por el aumento de una inmigración ilegal que parece imparable. Este dato no lo damos nosotros sino que son las estadísticas del Ministerio del Interior y de la Comunidad de Madrid. Esta inmigración ilegal se coordina a través de grupos organizados que son detenidos pero que al día siguiente están en la calle, lo que demuestra que la Administración de Justicia no funciona.

P: Pero no solo delinquen los inmigrantes...

R: De acuerdo, pero Instituciones Penitenciarias señala que la mayoría de los nuevos presos son inmigrantes y el Ministerio del Interior también indica que la tasa de delincuencia producida por inmigrantes en la Comunidad de Madrid en el último año es porcentualmente cinco veces la producida por españoles, lo cual merece una especial atención. La Comunidad de Madrid se ha transformado en uno de los lugares más inseguros de la Unión Europea.

P: Pero socialmente la aportación de la inmigración es importante...

R: Eso tiene para nosotros una diferente óptica porque el colectivo inmigrante, a pesar de ser masivamente ilegal, es el beneficiario de la mayoría de las ayudas sociales procedentes de fondos públicos como becas para libros, para comedor, plazas en guarderías, vivienda de protección pública... por no hablar de fondos públicos distribuidos a través de ayuntamientos o la Cruz Roja por ejemplo. ¿A que ningún político se ha paseado por las tiendas de alimentación de Lavapiés y ha visto que las estanterías están repletas de productos distribuidos por Cruz Roja? Pues esta es la realidad, y eso no es ninguna aportación social que digamos. Ahora bien, vaya usted a pedir cualquiera de esas ayudas y verá lo que la administración le dice con el dinero de nuestros impuestos.

P: Los economistas señalan que la inmigración es fundamental para mantener la Seguridad Social y las pensiones. ¿Opina usted lo contrario que los economistas?

R: Esa es una opinión que lanzan los economistas que participan de la elaboración de los programas de los partidos políticos y que ellos mismos cuestionan en privado, pero los economistas independientes no opinan eso ni mucho menos. Yo, que conozco a fondo el sistema de Seguridad Social afirmo que eso no se sostiene. Mire, la política de cupos tal y como ha sido gestionada ha sido nefasta para la caja de la Seguridad Social. Primero porque estipula un porcentaje muy alto del contingente para el sector agrario y empleados de hogar, que son regímenes especiales de cotización muy baja. Segundo porque no ponen freno a la contratación a tiempo parcial, siendo también una cotización muy baja. Y tercero porque se permite la agrupación familiar sin tener en cuenta la base de cotización, lo que genera núcleos familiares con un único cotizante que tienen un coste social y presupuestario muy alto en sanidad, educación, justicia etc. Sinceramente, si esa es la receta que tienen para salvar las pensiones, la aseguro que podemos ir todos suscribiendo un plan de pensiones privado.

P: Y los que cotizan al régimen general...

R: Nosotros no tenemos nada en contra de los que trabajan y cotizan al régimen general de la Seguridad Social, pero en términos económicos es insostenible que se permita que exista en España un colectivo de más de un millón de habitantes ilegales. Estos inmigrantes no realizan aportaciones a las arcas públicas, pero sin embargo sí reciben coberturas y prestaciones, ya sea sanitaria, de transporte público, o de educación. Además estos colectivos envían remesas de dinero fuera de nuestro país sin ningún control por parte de las autoridades, y eso una sangría económica de nuestra riqueza nacional que habría que cortar.

P: ¿Y en términos laborales?

R: Laboralmente la presencia de inmigrantes ilegales es utilizada por empresarios sin escrúpulos que les ofertan condiciones laborales por debajo de lo estipulado en los convenios y la normativa laboral, y esto lo que automáticamente genera es una bolsa de potenciales trabajadores que hacen el mismo trabajo por un coste más barato y sin derechos. Esto produce por un lado una competencia desleal hacia los trabajadores que prestan sus servicios legalmente, y por otro lado genera una competencia desleal hacia las empresas que cumplen con sus obligaciones. Y le puedo asegurar desde un punto de visto completamente profesional que el mercado laboral es una cosa muy delicada, que se desajusta y desregula en un abrir y cerrar de ojos.

P: ¿Y para ese problema usted cree que la solución es expulsarles?

R: La expulsión de los inmigrantes ilegales es sólo una parte de la solución. ¡Ojo! quiero dejar claro que cuando hablo de inmigrantes nosotros distinguimos entre los que han venido de manera legal, trabajan y pagan sus impuestos y los que viven de la economía sumergida o de la delincuencia. Para nosotros los primeros merecen todos los respetos, pero los segundos son un problema evidente que hay que atajar. En cuanto al tema de la expulsión sabemos que suena duro, pero sinceramente hay que poner un punto de partida y de inflexión, y este debe ser que quien viene de manera ilegal se expone a ser expulsado. Curiosamente los inmigrantes legales no politizados opinan en su mayoría como nosotros.

P: ¿Y después?

R: La inmigración no puede observarse desde otra óptica que no sea la del control. Tenemos diseñado un paquete de medidas que van desde el control de envíos de dinero al exterior al control específico de la contratación laboral de inmigrantes, pasando por medidas como el control presupuestario de las ayudas a colectivos más desfavorecidos, la creación de un registro de alquileres y viviendas para impedir la creación de guettos o de condiciones abusivas por parte de los arrendadores, la adaptación de aulas especiales en centros escolares para menores procedentes de otras culturas, el cierre de las mezquitas ilegales donde se propagan el radicalismo islámico, o la creación de cursos obligatorios de integración para los inmigrantes recién llegados para que estos conozcan nuestra cultura, nuestras costumbres y nuestras leyes y esto les permita adaptarse a ellas sin generar enfrentamientos con la población autóctona y respetando nuestra cultura, la cual debe ser a partir de ese momento la suya y no al revés.

P: ¿De toda la inmigración ilegal, cuál cree que es el colectivo más problemático?

R: Sin duda el de los países islámicos, porque a los problemas normales de adaptación hay que sumarles que su integración se hace prácticamente imposible porque tienen conceptos culturales antagónicos a los valores cristianos occidentales. El Islam no es solo una religión sino que es una concepción política en la que el Corán determina desde la forma del estado hasta las relaciones personales de pareja tanto en la intimidad como en público, y eso choca frontalmente con una sociedad abierta y democrática como la nuestra. Por ejemplo, nosotros entendemos que el hombre y la mujer tienen los mismos derechos y ellos no. En el Islam lo religioso y lo político son la misma cosa, por ejemplo el Rey de Marruecos es el líder político y también el espiritual, y eso sin hablar de países con regímenes teocráticos como Arabia Saudí, donde por ejemplo el propagar el cristianismo o la democracia al modelo occidental está castigado directamente con la pena de muerte.

P: ¿Cómo cree que van a influir los atentados del 11-M en el panorama político?

R: Hombre, ya lo ha hecho desde el momento en que se ha elegido para presidente del gobierno a Zapatero, que no iba a ganar ni de broma. El 11-M ha hecho abrir los ojos a mucha gente, porque hemos pasado de ser la retaguardia del terrorismo internacional a ser la primera línea de combate. Y es que Marruecos está a treinta kilómetros de nuestras costas y en Argelia que está a ciento cincuenta kilómetros hay una guerra civil declarada desde hace años tras la victoria electoral de los integristas del Frente Islámico de Salvación. Yo creo que en el subconsciente de la gente de la calle siempre estarán presentes los 200 muertos y los 2000 heridos de esos trenes.

P: ¿Estuvo todo el mundo a la altura de las circunstancias en el 11-M?

R: Los que más estuvieron a la altura fueron los profesionales de emergencias sanitarias de Madrid, que demostraron una vez más que son a mi juicio lo mejor del panorama sanitario mundial. Después para mí... la gente de la calle también estuvo muy en su sitio y demostró un coraje fuera de lo normal. Recordemos que en Nueva York el 11-S la gente huía despavorida abandonando la ciudad, mientras que en Madrid la gente acudía en riadas para ver en que podía ayudar. Y los que decididamente no supieron estar fueron los políticos, porque aquel día estaban más preocupados de la repercusión del atentado en las elecciones que en las víctimas. En ese sentido, y yo no me considero monárquico, hay que reconocer que la Casa Real fue la única que mantuvo el tipo.

P: Hablando de la Casa Real, ¿qué le ha parecido la boda?

R: Te vuelvo a repetir que yo no soy monárquico en absoluto, la verdad es que creo que pienso como la mayoría de los españoles. De hecho me parece de lo más antidemocrático que alguien por el hecho de ser hijo de una determinada familia tenga más derechos que los que hemos nacido de otra. Pero la figura de D. Juan Carlos tengo que reconocer que no me desagrada, e incluso en algunos momentos ha sabido estar y templar situaciones en las que los políticos perdían las formas, y el norte. Y en ese sentido me parece que D. Juan Carlos ha generado tranquilidad.

P: En los meses que lleva el gobierno de Zapatero ¿qué le ha parecido su gestión?

R: Hasta el momento sólo han trabajado de cara a la galería y a las encuestas, pero realmente no están gobernando. Yo diría que Zapatero ha cumplido dos promesas fundamentalmente: Ha retirado las tropas españolas de Irak antes del 30 de junio y ha retirado la selección española de Portugal antes del 30 de junio. Bueno perdón, se me olvidaba que también le han puesto una medalla a Bono. Sólo falta que Zapatero diga que habla catalán en la intimidad aunque para eso todavía hay tiempo.